martes, 31 de diciembre de 2013

Una de las tradiciones más arraigadas de las fiestas navideñas es tomar 12 uvas para fin de año, coincidiendo con las campanadas de medianoche.

Puede que hayáis oído decir que esta tradición se remonta al 1909, cuando unos productores levantinos tuvieron un excedente de uvas al que quisieron dar salida. Pero parece ser que éste no es el origen de la tradición sino que la tradición ya existía y los agricultores la popularizaron para sacar provecho.

Concretamente, a finales del siglo XIX ya encontramos referencias escritas a la costumbre de comer uvas en fin de año :
Este fragmento del semanario satírico Gedeón , del 14 de enero de 1897, desmiente otra publicación que habla de la costumbre madrileño de tomar 12 uvas para fin de añ . Fuente .

Este otro artículo aparece un año después, el 31 de diciembre de 1897 en el diario liberal El Imparcial. Fuente.


A partir de ahí, dice la leyenda que la costumbre de los madrileños de tomar las uvas en la Puerta del Sol para fin de año tiene origen en un bando municipal de 1882, que imponía una cuota de 5 pesetas a aquellos que quisieran salir de fiesta el 5 de enero. Como respuesta, algunos madrileños trasladaron la fiesta al fin de año y comieron las uvas en la Puerta del Sol. Esta idea parece que surgió para burlarse de las familias adineradas, que tomaban champán y uvas para la cena de fin de año .

La tradición se fue extendiendo por el resto de España y por varios países latinoamericanos y hoy es uno de los rituales gastronómicos más seguidos.

Desde Charlas con la nevera aprovechamos este momento para despedirnos de vosotros hasta el año próximo.

¡Feliz 2014!

jueves, 19 de diciembre de 2013

La nostalgia de la naturaleza y la dieta de Zuckerberg.

En el post anterior hablábamos de algunas formas de acercamiento de los urbanitas a la cultura rural. Vivir en la ciudad despierta en algunas personas una especie de añoranza por el contacto perdido con la naturaleza.

Pero dicen que la nostalgia ya no es lo que era. Y que a menudo el pasado no fue tan bonito como lo recordamos. Más aún cuando se trata de un pasado que no hemos vivido nosotros, como ocurre con muchos urbanitas que nunca han vivido en el campo .

La vida en el campo tiene una vertiente duro que no todo el mundo tiene presente. Quizás es cierto que la comida hiperprocesada y servida en bandejas de plástico nos aleja de la madre naturaleza. Pero cuántos de vosotros estaríais dispuestos a matar y desplomar pavo con vuestras propias manos para hacer la comida de Navidad?

La Navidad visto desde el punto de vista de los animales. Fuente.
Hace un par de años , Mark Zuckerberg , fundador de facebook, revolucionó los medios cuando afirmó que él sólo comía animales que había matado él mismo. Muchos sospecharon que con esta confesión, Zuckerberg dejaba claro que era un sádico o un excéntrico (o ambas cosas). Él argumentaba que matar a los animales lo hacía más consciente de lo que comía.

En el fondo se trata de una manera de retomar el contacto con la naturaleza pero tal como era realmente, sin versiones azucaradas. Añadía Zuckerberg que con esta costumbre había aprendido mucho sobre agricultura sostenible y sobre animales y que prácticamente se había convertido en vegetariano.

A partir de aquí se abren muchas reflexiones interesantes. ¿Cuánta gente se haría vegetariana si siguiera la dieta de en Zuckerberg de no comer ningún animal que no haya matado él mismo? Es natural sentirse mal por matar a un animal que nos vamos a comer? Hacia dónde está evolucionando nuestra relación cultural con los animales que nos sirven de alimento?

martes, 17 de diciembre de 2013

Vida y jubilación de las gallinas urbanas.

La semana pasada hablábamos de las diversas formas de vida de las gallinas que producen los huevos que podemos comprar. Últimamente en nuestras ciudades están proliferando los huertos urbanos y toda una cultura de producir alimentos de forma local.

Siguiendo esta línea, en muchos hogares urbanos (normalmente casas unifamiliares con jardín) vuelve a haber gallinas. La idea es tener una fuente de huevos frescos, siendo conscientes al 100% de la forma de vida de las gallinas que los han puesto. También es una manera de no perder el contacto con la naturaleza y de tener una mascota exótica que puede divertir a los niños.

Desgraciadamente, muchos de los urbanitas que se han apuntado a adoptar gallinas no saben que las gallinas no ponen huevos durante toda su vida. Llega un momento en que, como ocurre con las mujeres, dejan de ser fértiles. Y entonces se les plantea el dilema: ¿qué hago con una gallina que ya no pone huevos? ¿La sigo alimentando ? ¿La abandono en el bosque?

Antiguamente, los payeses que tenían gallinas no tenían este tipo de angustias. Imaginamos que la frase "la gallina vieja hace buen caldo", dejando de lado su sentido figurado, tiene su origen en este "problema". Pero hoy en día, muchos urbanitas toman demasiado afecto a las gallinas y no son capaces de convertirlas en su cena.

En los EEUU, donde la cultura neorural tiene bastantes seguidores, existen varias granjas que ofrecen la posibilidad de jubilar a las gallinas o a otros animales. Incluso, de vez en cuando, sale algún millonario excéntrico dispuesto a erigirse en una especie de Schindler de las gallinas .

Un niño observa una gallina a Animal Place, el santuario para animales donde un millonario ha enviado 3.000 gallinas.

Detrás de esta anécdota tan curiosa hay una reflexión importante sobre si los animales que comemos deben ser algo más que un producto de consumo o si se puede compaginar el hecho de comerlos y que les demos un trato más humanitario.

Próximamente, intentaremos tratar este tema más a fondo .

jueves, 12 de diciembre de 2013

El número de los huevos y la felicidad de las gallinas.

Ya hace unos meses que el supermercado vi una caja de huevos que se anunciaba como "huevos de gallinas felices". Quizás os estaréis preguntando qué tipo de tests psicológicos hacen a las gallinas para descubrir su grado de felicidad. 

El caso es que me informé sobre los diferentes modus vivendi de las gallinas y descubrí que cada huevo tiene un número grabado en la cáscara y que el primer dígito corresponde a la manera cómo vive la gallina. He encontrado aquí una imagen que lo resume muy gráficamente :

Después de leer las especificaciones, creo que entre el 0 y el 1 hay un poco de trampa porque las diferencias se encuentran en aspectos que no se reflejan en una foto . Y las diferencias que vemos entre las fotos (que haga sol , que el césped sea más alto ... ) no salen en ninguna parte de la normativa .

Intentaremos resumir las características principales de cada una de las 4 modalidades :

3 . Gallinas en jaulas. Las jaulas pueden estar apiladas unas sobre otras, aunque acondicionadas adecuadamente para que los excrementos no se mezclen con los huevos. La densidad de gallinas por jaula es muy alta, con un espacio útil de 600 cm2 por gallina (una hoja de papel DIN A4 615,3 cm2 ) .

2 . Gallinas criadas en el suelo. Las gallinas ya no están enjauladas pero siguen teniendo muy poco espacio. Tanto en este caso como en el anterior, se suele cortar el pico a las gallinas para que no se agredan entre ellas.

1 . Gallinas camperas. Las gallinas se mueven entre un corral y una zona al aire libre . Tienen espacio para moverse con cierta libertad y no es necesario cortar los picos.

0 . Producción ecológica. La forma de vida es muy parecida a la anterior (corral y aire libre) y la densidad de gallinas también. Lo que varía es que un 80 % de lo que comen debe provenir de la agricultura ecológica y que no se utilizarán medicamentos convencionales para tratarlas.

Como os podéis imaginar, la forma de vida 3 es la más productiva y la que permitirá encontrar los huevos más baratos en el supermercado. Hay quien afirma que en la Unión Europea las normativas son suficientemente estrictas como para que estas condiciones no afecten suficientemente a las gallinas y los huevos sean igual de saludables que los de los otros modos de vida .

Y hay quien opina que debemos ser más respetuosos con los animales que nos dan de comer y que si no damos a las gallinas un mínimo de espacio es más que probable que tengan problemas de salud que repercutan sobre la calidad de los huevos .

Nosotros opinamos que es necesario que la gente tenga el máximo de información y de formación sobre lo que come (por eso hacemos este blog, entre otras razones) . Y que decida en consecuencia.

martes, 10 de diciembre de 2013

¿Cómo tener una buena digestión?

El otro día hablábamos de la importancia de digerir bien los alimentos. Pero ¿qué podemos hacer para mejorar nuestras digestiones?

Desde este blog os aconsejamos :

  • Masticar bien. La digestión de los glúcidos empieza en la boca. La saliva ayuda a procesar el pan, la pasta o el arroz . 
  • Tranquilidad y buenos alimentos. Comer hortalizas y fruta fresca os ayudará a digerir. Especialmente indicadas la papaya y la piña, habituales para cerrar comidas navideñas. Por el contrario, las prisas y el estrés pueden provocar más de un dolor de estómago . 
  • Cocinar con pocas grasas. Mejor a la plancha que frito o con salsas grasas. Muchas comidas ligeras mejor que pocas y abundantes. Así reducimos el esfuerzo que le estamos pidiendo a nuestro aparato digestivo. 
  • Descansar después de una comida pero no estirados. La postura horizontal dificulta la digestión . Es bueno cenar temprano, al menos tres horas antes de meternos en la cama.


Por último , aunque en algunos licores se les llama digestivos, beber alcohol no mejora la digestión. El efecto más evidente del alcohol es el de retrasar la digestión, ya que el mismo alcohol también se ha de metabolizar y pasa por delante de otros alimentos.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Contrabando

La luna emerge detrás de silueta recortada de las peñas mientras él lanza el último saco de trigo al carro. El esfuerzo le hubiera hecho sudar si la noche no fuera tan fría. Las vacas empiezan a andar. Las guía hacia el camino de polvo y piedras, el que lleva al molino.

Las ruedas de madera y acero hacen un ruido terrible. Al hombre se le dispara el corazón cuando, al pasar la última casa del pueblo, un perro empieza a ladrar. Quizás haya suerte y nadie se levante a tiempo para verle, piensa. Suerte y complicidad, claro. Porque todos los vecinos hacen lo mismo. Ninguno piensa renunciar a tener suficiente harina como para que los de casa puedan pasar el invierno sin hambre.

El carro atraviesa lentamente los campos de cereal ya cosechado. De vez en cuando se levanta una ligera brisa y un escalofrío recorre la espalda del hombre que, por alguna razón, echa la vista atrás para comprobar que sigue llevando toda la carga.

Al llegar al cruce con la carretera se baja del carro. Se aleja unos pasos de la mercancía para inspeccionar el terreno. No ve a nadie. Vuelve a por el carro y ayuda a las vacas a remontar el repecho que sube hasta el cruce. Al otro lado de la carretera ya se ve el molino. Arrea a las vacas para que aceleren el paso pero entonces una voz surge a sus espaldas, una voz que da el alto. Gira la cabeza y ve dos siluetas coronadas por un tricornio.

Le requisan el carro, las vacas y las tres talegas grandes de trigo que llevaba. Deberá pagar para que le devuelvan el carro y las vacas. En cuanto al trigo, quién sabe si servirá para nutrir a las famélicas familias que acuden al racionamiento o si se utilizará para engordar la fortuna de algún estraperlista.

La tracción animal movió la agricultura durante muchos siglos y seguía vigente en España hasta hace sólo tres o cuatro décadas. 

martes, 3 de diciembre de 2013

¡Buen provecho!

Existen diversos rituales para los instantes previos a una comida. El otro día ya hablamos de los que bendecían la mesa o la fotografiaban para el Instagram. Pero una alternativa tradicional y laica a estos dos hábitos es desear al resto de comensales "Buen provecho".

Es breve y quedas como una persona educada pero no todo el mundo es entusiasta de esta fórmula . Hay quien, cuando le desean buen provecho piensa en el kilo y medio de grasa que atesora a ambos lados de los abdominales y responde "gracias" con la boca pequeña. Porque le gustaría que la comida pasara algo de largo a través de su tubo digestivo, no haría falta aprovecharlo todo tan bien.

Pero no es un deseo sensato. Una buena digestión de los alimentos es muy importante para nuestra salud. Cuando la digestión es deficiente, los nutrientes no se procesan correctamente y nuestro cuerpo recibe material en mal estado para su funcionamiento. Se pueden crear algunos compuestos algo tóxicos y esto acaba significando un mayor desgaste de hígado, riñones, colon o sistema inmunitario.

Por todo ello, cuando os deseen " buen provecho ", lo mejor es sonreír sin reservas y decir "gracias ".


Ser educado no cuesta mucho dinero pero se necesita trabajar en ello desde muy pequeño . Foto .

La próxima semana os explicaremos unos consejos para mejorar la digestión .